Si tiene el suficiente valor dramático, por supuesto que puedes meter un velocirraptor en la trama. Faltaría más.

lunes, 24 de noviembre de 2014

Guión Básico para principiantes: ¿Cómo hacer una buena segunda parte?

¿Por qué las segundas partes suelen ser malas de cojones? ¿Qué es lo que hace a una secuela buena? ¿Por qué motivo hacer una segunda parte? ¿Por qué hacer una trilogía? ¿Por dinero? Por supuesto. ¿O también porque las trilogías son ahora muy cool? Todas estas cuestiones espero resolverlas con esta entrada. 

Primero vamos a definir lo que es "secuela". Según la RAE, "secuela" es lo que hacen las viejas en el súper. Eso ya hace presuponer su sentido negativo en nuestra escala de valores. Y es que las secuelas se han ganado mala fama por ellas mismas, porque la mayoría son una puta mierda, objetivamente esto es cierto. Según estudios científicos de la Universidad de Micronesia algunas secuelas pueden alterar la personalidad de ciertas personas y aumentar el calentamiento global. Pero no se puede ir sistemáticamente mandando a la mierda cualquier secuela. Existen secuelas muy buenas. 
Probabilidades de que una secuela sea tan buena como la original en distintos medios

Ahora bien. Tú, escritor, quieres escribir una secuela. Puede ser que seas el autor de la primera parte o puede que te hayan encargado la dura tarea de escribirla a partir de una primera parte ya hecha. A esto último, básicamente, se le podría llamar "cargar con el mochuelo". En caso de que tú seas el autor de la primera parte (y hablo tanto para cine como para novelas), lo mejor, lo más óptimo, sería saber de antemano que va a haber una secuela, más que nada para guardarte en la primera algún misterio o algún giro para que se resuelva en la segunda o en la tercera. Porque no suele haber dos sin tres, por mucho que Bill Murray no quiera. 


¿Qué tipos de secuelas hay? Yo distingo unos tres tipos: 
  1. Secuelas ya pensadas: por ejemplo, yo adapto una trilogía y ya se de antemano que estoy escribiendo la primera parte para que haya una segunda y una tercera o una segunda y una tercera dividida en dos. Muy de moda hoy en día con eso llamado "sagas". Ej: Star Wars, El Señor de los Anillos, Harry Potter, El Caballero Oscuro, Regreso al Futuro…
  2. Secuelas random: una película tiene éxito y los productores deciden que es buena idea continuar la historia. Suele continuar la historia de la primera parte pero no siempre. Ej: Jurassic Park, Aliens, Terminator… 
  3. Secuelas episódicas: suelen tener mismos personajes y mismo género, pero cada una es una aventura diferente, sin relación con el resto. Ej: Indiana Jones, Star Trek, Viernes 13, Pesadilla en Elm Street, Godzilla… 
Pero claro, llega un punto en el que todo se mezcla, porque Star Trek hasta la cuarta parte si que tiene una cierta continuidad, y lo mismo con las tres primeras de Pesadilla en Elm Street. Y a eso hay que añadirle que a veces una secuela puede ser secuela pero de la precuela, y que esa precuela puede ser a la vez un remake camuflado y vete tú a saber qué más. 

Vale, pues sabiendo los tipos de secuelas que hay es hora de entrar en materia. Vamos a analizar varias secuelas que son la hostia para intentar sacar en claro qué coño tienen que las convierten en buenas segundas partes. 

1) EXPANSIÓN: una de las claves para hacer una buena segunda parte es no caer en el refrito porque sí. Repetir la misma fórmula que ha funcionado en el pasado y hacer lo puto mismo. Así sólo vas a lograr tener miles de secuelas iguales que no se diferencian entre sí. Lo típico de las sagas slasher. Si lo que funciona es el esquema de seis jóvenes y un asesino psicópata se los carga uno a uno… venga, hagamos lo mismo pero en vez de en una casa abandonada en un hospital abandonado. Cualquier cosa sirve para cagar secuelas. 
Lo dicho, expansión. Una buena secuela sí que tiene que tener esa esencia que tenía la primera, pero de alguna manera tiene que avanzar, no puede estancarse en lo mismo. Es obligatorio expandir el universo, como bien hace Star Wars. Y aquí tenemos ejemplos muy buenos. Por ejemplo cojamos 'Alien' y su segunda parte 'Aliens, el regreso'. La primera era una peli de terror brillante, con mucho misterio en torno a la criatura que tenía toques slasher. Pero de pronto la segunda lo cambia todo, incluso casi el género. Ahora no sólo hay un alien, hay miles. Y, aunque el ambiente es igual de asfixiante, notamos que todo tiene una progresión con respecto a la primera, y empezamos a saber más cosas de estas criaturas, que guardan más de una sorpresa. Pero lo dicho, aunque el género cambie, esa esencia de el ser humano contra las grandes corporaciones (Ripley vs Weyland-Yutani) sigue ahí. 
Y lo mismo con la secuela de 'Regreso al Futuro'. Mientras que en la primera viajábamos al pasado, a 1955, en la segunda vamos a más. De hecho viajamos por tres líneas temporales diferentes: primero al futuro, luego al presente y después al mismo pasado al que habían viajado en la primera. Y creo que por eso la tercera parte no es tan perfecta. Me encanta, pero después de esa segunda parte tan montaña rusa las expectativas estaban por las nubes. 
Ojo, esto no quiere decir que una segunda parte tiene que tener más explosiones o ser más espectacular. Más tetas sí, eso siempre funciona. Pero de lo que hablo es de expansión del universo, descubrir más de ese mundo y de esos personajes.
"¿Y si te dijera que 'El Templo Maldito' es una precuela de 'En Busca del Arca Perdida'?"

2) PROFUNDIDAD: Una segunda parte debería hacernos conocer mejor a esos personajes que tanto nos gustaron en la primera parte. Al final de ésta fueron felices y comieron perdices pero… jeje, seguro que surgen nuevos problemas. ¡Pues cuéntalos! Seguro que hay nuevos conflictos que contar, y mejor si están relacionados con la conclusión de la primera parte. Típico prota que, aunque todo había acabado bien, parece que aquella situación le ha traumado y ahora tiene que recuperar su vida. Y, sin embargo, parece que eso malo que le pasó está apunto de volver. 
Es un buen momento para añadir sorpresas y giros sobre nuestros personajes. Por ejemplo en 'El Imperio Contraataca' se nos revela que Darth Vader es el papá de Luke, y en el 'Retorno del Jedi' que Leia es su hermana. Este chico no gana para sustos. 
En 'El Padrino II' conocemos más sobre la vida de Vito Corleone mientras a la vez nos cuentan la vida de su hijo, que se va convirtiéndose cada vez más en un maderfacker. 
Vito está muerto en la segunda, ¿por qué ahora nos cuentan su historia? ¿Qué más nos da si sabemos cómo va a acabar? Pues es sencillo: porque es una historia cojonuda, mejor que la mayor parte de la historia de Michael, y porque a través de su historia y de todas las decisiones que tuvo que tomar en el pasado para haber llegado a donde llegó, podemos entender las decisiones que toma Michael en contraposición. 

3) RIESGO: Cuanto más grande sea el desafío más enganchados de la historia y de su resolución estaremos, y eso es así en cualquier guión. Eso sí, el desarrollo tiene que estar a la altura. Y, sobre todo, el malo de turno. Algo con lo que Marvel está que no caga es que los villanos de cada entrega tienen que ser cada vez más temibles. Y es normal, porque si Iron Man o quien sea se ha cargado a un ejército de alienígenas de otra dimensión y en la siguiente se tiene que enfrentar a un loco con armadura y algún que otro misil pues… bueno. Nos da la sensación de que no es tan arriesgado. 
'Terminator 2', por poner otro ejemplo, sigue el mismo esquema de la primera pero… ¡pero algo cambia! ¡Se da la vuelta a sí mismo! Ahora el malo es bueno y hay un malo peor. Un malo con mucha personalidad. Si el primero ya era la leche porque era un jodido robot indestructible, este es mil veces peor. Metal líquido, se hace, se deshace, puede cambiar de forma, imitar voces… Imposible superarlo, ni siquiera poniéndole tetas. 
Y es que todo aquello que nuestros personajes consiguieron en la primera debe estar en riesgo. Otra vez John Connor amenazado y, con él, el futuro de la humanidad. ¿Qué hay peor que la destrucción del mundo? Exacto: una secuela sobre la destrucción del mundo. 

4) CONTINUIDAD: algo que no es muy común es comenzar una secuela justo donde acabó la primera parte. Siempre han pasado algunos meses o incluso años. Casi todas las secuelas tienen elementos de continuidad que las conectan con la original. 
Y claro, si estás escribiendo la primera parte pero no tienes ni idea de si vas a hacer segunda parte (igual ni siquiera de lo planteas), siempre puedes aprovechar un fallo en tu resolución. Por ejemplo, tomando eso que he dicho antes de "fueron felices y comieron perdices" podríamos pensar: ¿qué podría pasar entre ellos para crear un nuevo conflicto que ponga en riesgo todo lo logrado en la primera parte? Y aún diría más. Hay que expandir eso, darle una vuelta de tuerca y encima añadir un antagonista más… personal. 
Busca más fallos. Quizás el malo tenía un hijo y ahora es él quien se quiere vengar de nuestro protagonista. Sería un conflicto más duro, porque si lo vemos todo desde otro punto de vista… parece que el malo es el prota. Se especuló mucho sobre la secuela de 'Kill Bill' en esta línea. A mí me gustaría ver esto. 

Se me ocurre un ejemplo. Pongamos que has escrito una peli o novela sobre un tío buscando a su padre desaparecido y al final lo encuentra. Todo parece bonito. ¿Cómo coño podríamos continuarlo en una segunda parte? ¿Cuál podría ser la fuerza antagonista? ¿Y si el antagonista es el mismo padre? Démosle un plot-twist. ¿Y si el padre no es realmente su padre? ¿Y si le ha seguido el juego al prota todo este tiempo, desde que acabó la primera parte? Ya estamos expandiendo este universo y estamos añadiendo profundidad al personaje del padre y, a través de él, podríamos conocer más sobre el pasado del chico y cómo son sus relaciones a partir del reencuentro y después de esta grieta. Pero… falta algo de riesgo. ¿Y si fue ese tío que se hace pasar por el padre el asesino de su padre? ¡Ostras! Ahí ya hay más cosas en juego: la supervivencia. En cualquier momento puede volver a matar. 

Yo creo que jugando con estos cuatro elementos se pueden hacer grandes cosas. Si se me ocurren nuevas ideas iré añadiéndolas a la entrada. Como siempre, os invito a la conversación, reflexión y análisis en comentarios. Os invito además a agregar títulos de buenas secuelas a la lista de abajo del todo. Según me vayáis diciendo por Facebook, Twitter o comentarios, iré añadiéndolas. No tienen por qué ser mejores que la primera, simplemente que sean buenas. 

Y ahora que hemos terminado de comentar cosas que es recomendable tener en cuenta en una secuela, vamos con las cosas que no se deben hacer: 

1) Cambiar a los protagonistas: esto va para vosotros, Nolan y Zemekis. No tenéis ni idea de lo molesto que es que de una parte a otra la chica protagonista cambie completamente de aspecto, es algo que no soporto. Le resta muchísima credibilidad a la saga, porque el espectador tiene que hacer un mayor esfuerzo para meterse en la historia. Sé que no les haría gracia tener que despedir a esas actrices, ya sea porque pedían mucho dinero o porque les gusta comer placentas, pero al menos contrata otra que se le parezca. 

2) Cambio de personalidad: una de las cosas que menos me gustó de la secuela de 'Jurassic Park' fue que no estaba el Dr. Grant en ella, pero bueno, estaba Ian Malcolm. Sin embargo se hacía raro, porque no parecía del todo él. Ya no era ese profesor matemático secundario, experto en teorías del caos y mierdas, con una pierna rota. Era como si su personalidad hubiese sido mezclado con ADN de Indiana Jones o algo así. 

3) Contradicciones: caer en contradicciones suele ser típico de precuelas, como en 'Star Wars' por poner un ejemplo. De todas formas ya hablaremos en otra entrada de precuelas, pre-secuelas y todo lo que sea antes de. 

4) Resurrecciones mierder: una de las peores cosas que puedes hacer en la vida. Que se vea cómo un personaje revienta en miles de trozos y en la siguiente parte aparezca diciendo que "todo estaba preparao. Era una broma, para ver qué cara poníais" es como para matar al guionista. 

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Lo dicho arriba: hagamos una lista de secuelas buenas, esas que han conseguido reinventarse y alejarse de la primera. Ojo, que no significa que sean necesariamente mejores que la original, sino que son ejemplos de que existen segundas partes que también merecen la pena:


–El Imperio Contraataca
–El Padrino, parte II
–Batman 2: El Caballero Oscuro
–Regreso al Futuro 2
–Aliens (Secuela de 'Alien')
–Terminator 2
–Toy Story 3
–Indiana Jones y la Última Cruzada
–El Ejército de las Tinieblas (Secuela de 'Evil Dead')
–El Señor de los Anillos: El Retorno del Rey
–Blade 2
–El Color del Dinero (Secuela de 'El Buscavidas')
–Agárralo como Puedas 2 y 1/2
–Pesadilla en Elm Street 3
–Jungla de Cristal 3
–Gremblins 2
–Amanecer de los Muertos (Secuela de 'La Noche de los Muertos Vivientes')
–El Mundo Perdido (Jurassic Park 2)
–X-Men 2
–Scream 4
–Mad Max 2
–007: Skyfall
–Men in Black 3

4 comentarios:

  1. La cosa (Aunque es un remake-secuela)

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  2. —Rocky IV
    —Acorralado, parte II
    —Desperado o La balada del pistolero
    —Shrek 2
    —Superman II
    —Ace Ventura 2: misión en África...

    En general, no es difícil encontrar buenas secuelas que si bien, no siempre superan a las primeras, sí pueden llegar a estar a la misma altura o, al menos, a una bastante decente. Lo que pasa es que las que son malas hacen mucho ruido y cabrean lo suyo al manchar al sentirse que de alguna forma alteran la percepción —e incluso manchan— a la primera historia que se creó.

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  3. Saraband (Ingmar Bergman, 2003)
    Manderlay (Lars von Trier, 2005)

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