Después de entradas donde explicaba las normas básicas de la escritura de un guión, los errores más comunes a la hora de crear las tramas, otra explicando qué eran esas cosas llamadas escaletas y tratamientos, cómo ser un crítico de cine cojonudo etc. he decidido dedicar una entrada extensa a la creación de LOS PERSONAJES.
La creación de personajes en guión es algo realmente difícil, hay que trabajar mucho para conseguir que el público sienta empatía por ellos, que sean atractivos para el espectador, que hagan avanzar la trama con sus decisiones y que encima haya química con el resto de personajes. ¡Menudo reto!
Realmente no es tan complicado, y se va haciendo más fácil cuantos más guiones vayas escribiendo, porque todo se reduce a pura mecánica creativa. La creatividad tiene reglas, los guiones tienen normas. Nunca hemos sido del todo libres. Nuestras ideas y nuestras idas de olla dependen de si son favorables o no para los que nos rodean. Dependemos de nuestro entorno para sobrevivir, esa es la putada. Simplifiquemos esta mecánica a una forma muy simple.
El esquema general de cualquier película viene a ser el siguiente: